jueves, 31 de enero de 2008

EL VERDADERO AMOR SABE ESPERAR

Creí que te había superado,
Fuiste siempre un imposible.
Solo te miraba caminar por ese largo pasillo.
No hacia nada más que mirarte.

De pronto apareciste en mi vida otra vez,
Pero esta vez ya no fuiste un imposible.
Pude estar a tu lado, pude hablarte, pude admirarte, pude tocarte.
Y entonces paso lo inesperado.

Primero llego el saludo, después el coqueteo…
Pero que estoy haciendo, ¡no puede ser!
Tú perteneces en otro corazón.
La realidad es clara, no me importo.

“Hijas de Jerusalén, no hagáis despertar el amor hasta que quiera…” dijo el Sabio Salomón.
Yo hice más que eso, desperté un amor equivocado, un amor imposible…
¿Como lo detendría ahora? ¿En que acabaría esto?
Estoy dentro de un terremoto y siento que soy el epicentro.

¡Detente! ¡No sigas! ¡Dios sácame de aquí!
¡Sácame de lo que empecé yo misma con mi necedad!
No soy fuerte, no lo puedo soportar mas, no puedo sola.
Y mientras en mi confusión, todo mi mundo daba vueltas.

Admito que me equivoque, pero ¿quien se equivoca así?
¿Quién no mide las consecuencias antes de accionar?
¿Como decepcionarte, como decepcionar a mis padres?
¿Cómo darle la espalda a todo lo que yo era?

Me vi como una flor que lentamente se marchitaba,
Que día a día perdía su brillo, su hermosura; que dejaba de ser flor.
¿Como despertar de esta pesadilla?
¿Como abrir mis ojos, tras haber sido vendados?

No lo se. Solo se con certeza que entre mi confusión,
Tú y solamente tú, me devolviste vida otra vez.
Volví a renacer, volví a ser yo, volví a ser flor.
Y mientras medito, estas palabras se anidan en mi corazón:
El verdadero amor sabe esperar…



PAOLA 2008

No hay comentarios: