OH negra tempestad, te avecinas como un león que rodea a su presa.
No hay nadie que lo pueda detener, nadie que le haga frente.
Fuertes torrentes de lluvia y relámpagos; garras que destruyen a su paso. Una ves que se van y terminan dejando a su paso destrucción y tragedia.
¡OH negra tempestad! ¡Si solo supieras que yo provoco tu venida!
Yo soy la culpable de que entres a mi vida y dejes atrás dolor.
Debí haber aprendido la primera vez que pasaste por mi vida.
Debí haber construido un refugio para que no me lastimaras.
Debí haber levantado fortalezas y nunca confiarte mi tesoro.
¿Mi tesoro? Si, un baúl lleno de diamantes, piedras preciosas y oro.
Mi tesoro es mi corazón y tu Negra tempestad el Amor.
PAOLA 2008
No hay comentarios:
Publicar un comentario